____
Prestas un poco de atención y de fondo escuchas The Top of the Morning de Mike Oldfield. Entonces te das cuenta, con los ojos entrecerrados a causa del madrugón que te ha tocado pegarte, de que estás sentada en tu coche -pilotado por tu padre- de regreso desde Barcelona y tienes una leve sensación de dejà vu... te recuerda a tu más tierna infancia, al trayecto de casi todos los fines de semana, y te sientes genial.

Retornas a casa después de la charla de Traducción en la UAB -porque sí, te han admitido... aunque en séptimo lugar y eso te defrauda un poco, pero en el fondo sabes que eres una privilegiada-, que realmente ha resultado útil, y además has conocido a un montón de futuras compañeras de carrera. Todo te da esperanzas de que puede funcionar tu próximo traslado a Cerdanyola, y mejor si al final consigues entrar en la Vila Universitària, como parece ser muy probable.

Miras por la ventanilla derecha del coche, debidamente equipada con tus nuevas gafas de sol, y seguidamente diriges tu mirada hacia la bolsa llena de obsequios de la UAB que te ha sido repartida y te diviertes imaginándote usando la "gotimplora". Parece que las preocupaciones que has ido arrastrando durante las últimas semanas se vayan disipando, y más todavía los miedos que no te han dejado dormir apenas poco más de 4 horas la noche pasada. Aún queda mucho camino por andar, pero parece que la primera piedra ha sido debidamente colocada... y lo has hecho tú sola.

Ahora sólo queda volver el miércoles para formalizar la matrícula, elegir idioma C (Alemán, está decidido) y visitar el "piso piloto" de la Vila. A ver si vuelve a haber suerte y podemos volver a extender las cuerdas para iniciar una relación cordial con mis posiblemente nuevos vecinos. Pero en estos momentos, prefiero evadirme bajo la genial musicalidad del creador de Tubullar Bells a pensar cómo se desarrollará la jornada del 22.
~