Dicen que el amor no hay que buscarlo, que llama inesperadamente a tu puerta. Además, dicen que si insistes en encontrarlo en un determinado momento no serás correspondido. Pero yo me pregunto ¿por qué si no lo busco y lo encuentro no me corresponde?

Sí, puede que algunos crean que para mi edad he vivido una experiencia que podría considerarse muy madura, y sí, es el único buen momento que el amor me ha reservado. Especifiquemos, "bueno", ya que si terminó como lo hizo... Pero bien, resulta que si somos sinceros se torció todo porque otra vida se cruzó en mi camino, yo no la buscaba, y no, no me correspondió. Así que, ¿cuáles son los requisitos para amar y ser amado?

Además ahora me encuentro viviendo en las sombras. No sombras de ésas que se refieren a un mundo lúgubre -aunque realmente no estoy en mi mejor etapa-, sino lo que Platón consideraría sombras: opiniones, ignorancia, apariencias. Vivo enganchada a una imagen, imagen cuyo dueño no parece dispuesto a aportar respuesta y aunque intente no darle importancia, muy a mi pesar se la concedo.

Por lo tanto, después de un par de experiencias frustradas sólo puedo preguntarme ¿qué hago mal? ¿a qué debo esperar? ¿este tiempo de incerteza me deparará otro más esperanzador? Esperemos que así sea, ya que observo la injusticia actuar a mi alrededor.